El fundador de la economía azul, Gunter Pauli, la define como aquella economía que apuesta por imitar los ecosistemas naturales, su comportamiento y cómo aprovechan cada recurso sin generar desperdicios y trasladarlo a los procesos de creación de bienes y servicios para hacerlos más eficientes y responsables con el medioambiente. En Gijón encontramos dos ejemplos de estas prácticas: Neoalgae y Semillas del Cantábrico.
En este Conecta Impulsa #1 que cuenta con la colaboración de Gijón Impulsa, hemos estado hablando con Fidel Delgado Ramallo, Socio Administrador y Co-CEO en Neoalgae, pyme tecnológica asturiana con un alto componente emprendedor e innovador dedicada a la biotecnología de microalgas, y con Gonzalo Viñuela de Semillas del Cantábrico, empresa gijonesa que se dio a conocer por su proyecto para instalar una plataforma de engorde de almejas con el objetivo de generar crías de almeja japonesa y babosa en El Musel.
El sector de la alimentación va a cambiar tras esta crisis causada por el coronavirus, "Creo que esto va a cambiar la forma en la que todos consumimos, a nivel europeo y a nivel global la gente va a apostar por el producto de proximidad", ha explicado Gonzalo Viñuela.
La convivencia entre lo tradicional y los productos innovadores puede ser una de las claves del futuro de la alimentación, "No solo es innovar, también hay que sacar un producto que no desaparezca del mercado, creo que es el pensamiento que hay que aunar, es el pensamiento en el que estamos metidos, los productos han de ser atractivos, sostenibles y con un respeto muy alto por el medio ambiente"
El sector agroalimentario ha tenido que renovarse y adaparse a la demanda, "Desde el inicio de la crisis del COVID-19 se detuvo un poco la venta de nuestros productos, nos reinventamos y sacamos un gel hidroalcohólico con componentes ecológicos, distinto a lo que hay en el mercado"
