Silvia Artidiello - Cepillos Sacema S.L.
El futuro viene pisando fuerte y, como se suele decir, sólo hay una opción "Adaptarse o morir". La digitalización es un proceso por el que todas las empresas van a tener que acabar pasando si no quieren quedarse atrás en el mercado.
Hoy en día disponemos de gran variedad de recursos que nos permiten mejorar los procesos productivos de las empresas, no sólo hablamos de robótica sino también de metodología.
La medición y control de datos permiten que las empresas puedan acelerar los procesos y optimizar sus recursos para obtener el máximo rendimiento, por ejemplo, reduciendo los tiempos de fabricación y disminuyendo el porcentaje de defectos gracias a las simulaciones virtuales que permiten detectarlos anticipadamente. La posibilidad de disponer de datos en tiempo real nos va a ayudar siempre va a favorecer a una toma de decisiones mucho más eficiente.
Alejandro Blanco - Director de Seresco
Los valores añadidos de la digitalización podrían ser dos. El primero, la subsistencia y continuidad de un negocio mejor gestionado. No digitalizar procesos es dar ventajas de partida a los competidores, y razones a nuestros clientes para desconfiar de nuestra capacidad de evolución y continuidad, o lo que es lo mismo, para perder pedidos por ineficiencias.
Y en segundo lugar, acometer una transformación digital permite a la entidad utilizar información consistente, disponible y segura, imprescindible para automatizar procesos no productivos o externalizarlos, ya que al integrar su información interna con la de proveedores de servicios, mejoran los tiempos en la gestión logística y los procesos administrativos ofreciendo: más información de valor a los clientes en tiempo real para integrarlos de manera efectiva en la cadena de valor, mejorar los tiempos de fabricación y entrega, reducir costes, ampliar capacidad productiva sin tener que invertir en más suelo y, por supuesto, seguir el ritmo que nos demanda el mercado.
Fernando Maltrana - Gerente de Ticmedia Soluciones Profesionales S.L.
Tenemos que partir de una premisa que para mi es inevitable: "Todo lo que sea susceptible de ser digitalizado lo será tarde o temprano". Tendremos todas estas mejoras:
- Optimización en compras y ventas con interconexión con proveedores y clientes
- Obtención de datos en tiempo real todas las fases del proceso, con datos desde las máquinas de producción y de control para medir y almacenar peso, soldaduras
- Mejores decisiones. Al tener más datos podemos tomar decisiones más fiables, estaremos ayudados por planificadores inteligentes que nos ayudarán en todos los procesos de la producción
- Fabricación inteligente, más segura y sin siniestralidad usando de robótica avanzada, almacenaje automatizado, inteligencia artificial, realidad aumentada...
- Incremento de la calidad tanto del producto final como de toda la organización
- Mayor velocidad al lanzar nuevos productos
- Mejor gestión del talento y mejor beneficio
Jose Ramón Natal - Cluster Manager en MetaIndustry4
La transformación digital es un hecho incuestionable al que se enfrenta la industria asturiana, el mercado actual demanda nuevas soluciones más flexibles, más ágiles y con un alto grado de personalización y, la única forma posible de responder, siendo competitivos, es a través la digitalización.
Cada una de las tecnologías habilitadoras existentes, aporta un valor añadido clave en las diferentes áreas de la empresa, desde los aspectos relacionados con la gestión, el diseño, la producción y logística, el marketing o la innovación.
Sin duda, el elemento clave para abordar un proceso de integración de tecnologías y soluciones habilitadoras, de forma estructurada, es la definición de una estrategia de digitalización. Esta estrategia debe estar basada en el liderazgo, la comunicación y la concienciación de todos los agentes que componen la empresa. Así mismo debe estar alineada con la estrategia de negocio de la empresa para lograr maximizar el valor añadido ofrecido por estas nuevas soluciones tecnológicas.
Isabel Santos - Desarrollo de negocio en Táctica TIC
La digitalización supone una oportunidad para simplificar, agilizar y automatizar los procesos de la industria asturiana. No sólo se trata de llevar al mundo digital lo que ahora hacemos de modo manual, sino de eliminar pasos del proceso, permitiendo a los trabajadores olvidarse de las tareas repetitivas, que aportan poco valor y centrarse en aquellas que realmente aportan. Tenemos también la oportunidad de repensar nuestra relación y comunicación con nuestros clientes, proveedores, etc. En ciertos casos, también es posible replantear los productos actuales para incorporar funcionalidades disruptivas. En cualquier caso, debemos tener en cuenta que la digitalización por sí sóla no aporta valor, sólo lo hace cuando se traduce en optimización de procesos o mejora de productos. Debe ser vista como una herramienta al servicio de la empresa y sus trabajadores, es decir, como un medio y no como un fin. Se trata de un proceso evolutivo, una mejora continua.
Marcos Viñuela - CEO Simbiosys
Para mí, el valor añadido de la digitalización en la industria en general, no solamente la asturiana, consiste en introducir cambios que permitan aprovechar al máximo las capacidades de las herramientas digitales y las tecnologías emergentes en términos de trazabilidad, monitorización y eficiencia de procesos productivos.
Este aprovechamiento de las últimas tecnologías, redundará sin duda en una mejora continua de la calidad de los productos fabricados, que junto a la mejora en la eficiencia y control de los procesos, son factores clave de la diferencia competitiva de la industria.
