Industria 4.0

Cobots: de la robótica industrial a los robots colaborativos.

Mientras que los robots industriales necesitan de un amplio espacio a su alrededor para establecer un perímetro de seguridad que evite el contacto del operario con el robot, los cobots no necesitan de medidas de seguridad adicionales.

Rafael Riestra
photo_camera Rafael Riestra

Canonical Robots inició su actividad en el año 2017, se definen como "Pioneros en la democratización de la robótica", añaden que "nos dedicamos al diseño, fabricación y comercialización de robots colaborativos. Ayudamos a las empresas a ser más eficientes, productivas, seguras y competitivas mediante la automatización de tareas."

Ventajas ofrecen los robots colaborativos

El mundo de la robótica ha vivido una importante revolución con la llegada de los robots colaborativos (CoBots). A diferencia de los robots industriales tradicionales, los cobots incluyen  sensores de fuerza en sus articulaciones que les permiten el trabajo conjunto o colaboración entre hombre-máquina por primera vez. En caso de colisión, la integridad del operario no se ve comprometida: el robot se detiene de inmediato y queda a la espera de la acción de un supervisor para reanudar su labor con un simple clic.

Estos sensores además proporcionan información en tiempo real sobre el estado, posición, unidades producidas, tiempo de trabajo y manteniendo, conectándose con el resto de herramientas del proceso productivo.

Principal diferencia entre un robot y un robot colaborativo

Mientras que los robots industriales necesitan de un amplio espacio a su alrededor para establecer un perímetro de seguridad que evite el contacto del operario con el robot, los cobots no necesitan de medidas de seguridad adicionales.

Son también de menor tamaño y peso, por lo que pueden instalarse fácilmente en las instalaciones existentes sin necesidad de una modificación importante: su base de 21cm se puede fijar a una mesa, pared o techo con sólo 6 tornillos, y necesitando solo de una toma eléctrica convencional para comenzar a funcionar.

Oportunidad para las pymes

Mientras que el robot industrial está indicado para tareas que requieran mover grandes pesos o realizar una única tarea en líneas de producción muy largas (miles de unidades), la flexibilidad y polivalencia de los robots colaborativos los convierten en la herramienta ideal para ayudar a PYMES y pequeños talleres a aumentar su volumen de producción sin aumentar los costes.

El operario puede introducir nuevas tareas o variaciones en el diseño en el cobot de manera sencilla y rápida, pudiendo cambiar de un programa a otro de igual modo que cambiamos de app en nuestros móviles...

El precio de los cobots es mucho menos que los robots industriales, estando la amortización media de los robots colaborativos entre los 9 y 14 meses desde su puesta en marcha, teniendo una vida mínima de 5 años garantizados a pleno rendimiento.

Demanda de sectores

Los cobots están teniendo gran aceptación dentro del sector industrial, pero también en la educación (universidades, centros tecnológicos y de formación), logística y salud. Por supuesto que el sector de la automoción y todo lo que le rodea (mecanizados, plásticos, montaje, etc..) supone un grupo importante, pero sería injusto encasillarlos ya que es su gran versatilidad lo que los caracteriza.

Aplicaciones reales

El brazo robótico se complementa con un cabezal o herramienta o específica para cada tarea a realizar. De este modo puede realizar trabajos de atornillado, pulido, pegado, doblado, etc.. El paletizado es la aplicación más demandada en la actualidad, pudiendo integrarse el cobot fácilmente al principio o final de la línea de producción, así como trabajar mano a mano con un operario humano. La alimentación y control de máquinas CNC y mecanizados es también una de las aplicaciones más habituales y que más éxito tiene en otros mercados como Francia o Alemania.

Asturias y robótica

Asturias es una región que cuenta con varias unidades de robot industriales, principalmente en empresas de gran tamaño del sector metal. Se sigue manteniendo la idea equivocada de que los robots colaborativos son caros, complicados de programar, y difíciles de instalar, por lo que tratamos de tomar una participación activa en todas las oportunidades que tenemos de acercar a las empresas a la nueva realidad tecnológica, mediante demostraciones y realizando acciones divulgativas.

La actual situación económica y los retos de descenso demográfico y falta de profesionales cualificados, hace que las PYMEs de esta región pudieran beneficiarse de esta tecnología para garantizar su subsistencia.

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