Asturias tiene una gran fortaleza que lleva más de cuarenta años sosteniendo el avance científico y tecnológico de la región: la Fundación para el Fomento en Asturias de la Investigación Científica y la Tecnología (FICYT), de la Consejería de Ciencia, Industria y Empleo. Su existencia es, en sí misma, un privilegio. No solo porque actúa como un puente imprescindible entre investigadores, empresas, administraciones y organismos financiadores desde el ámbito regional al europeo, sino porque es una de esas instituciones que hacen que la innovación no quede encerrada en laboratorios, sino que llegue a la sociedad y transforme el territorio.
Hoy, FICYT atraviesa uno de los momentos más expansivos de su historia reciente. A su papel consolidado como agente clave del Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación (PCTI) se suma una presencia creciente en Europa y una nueva dimensión estratégica: la creación de la Unidad de Cultura Científica e Innovación (UCC+i) del Principado de Asturias, un proyecto que sitúa a la divulgación y a la participación ciudadana en el centro del ecosistema científico regional. Una forma de enseñar la ciencia, hacerla cercana y demostrar que la investigación no es un mundo aparte, sino una herramienta compartida para avanzar como sociedad.
FICYT ha crecido con Asturias, impulsando programas de ayudas, becas, redes internacionales y proyectos que han permitido profesionalizar la investigación regional y conectar a los equipos científicos y empresariales con oportunidades de financiación y colaboración europeas. Hoy, con once proyectos europeos activos y el liderazgo regional de la Enterprise Europe Network (EEN), la fundación encara su 42 aniversario desde una posición sólida, amplia y profundamente conectada con los retos tecnológicos, sociales y económicos de la región.
A lo largo del último año, además, esta fundación ha dado gran visibilidad a un trabajo esencial que ha desarrollado durante décadas. Desde acompañar a investigadores en la búsqueda de socios hasta asesorar a empresas que buscan innovar o crecer internacionalmente, su actividad se ha diversificado respondiendo a un ecosistema regional cada vez más exigente, interdisciplinar y competitivo. Un contexto en el que la ciencia y la tecnología ya no son solo palancas de progreso, sino elementos de cohesión social y territorial.
Una UCC+i para acercar la ciencia asturiana a la sociedad
La creación de la Unidad de Cultura Científica e Innovación del Principado de Asturias, en el seno de FICYT, marca un antes y un después en la relación entre ciencia y sociedad dentro de la región. La fundación, consciente de que los resultados de la investigación científica sólo adquieren pleno sentido cuando se comparten y se entienden, ha puesto en marcha esta UCC que busca hacer accesible el conocimiento científico y fomentar una cultura investigadora sólida entre la ciudadanía.
Como explica Mercedes Díaz, directora de FICYT, esta unidad “se crea con el firme propósito de acercar la ciencia a todas las personas del Principado de Asturias de una forma accesible e inclusiva, lo que implica tener en cuenta necesariamente a los colectivos más vulnerables”. Su actividad se articula en torno a un programa amplio, variado y especialmente diseñado para conectar con públicos muy diferentes. Desde jornadas temáticas sobre ciencia marina o astronomía hasta actividades para familias, talleres inclusivos, visitas divulgativas y la organización de la Feria de la Ciencia de Asturias. Así, la UCC+i aspira a convertirse en un punto de encuentro entre el conocimiento científico y la sociedad.
Uno de sus focos fundamentales es la ciencia ciudadana, un movimiento que invita a las personas a participar de manera directa en la definición, seguimiento e incluso ejecución de proyectos científicos. Esto implica un cambio de paradigma: la investigación deja de ser un ámbito aislado y reservado a expertos para abrirse como espacio de colaboración colectiva. La idea es fomentar competencias, actitudes y curiosidad en la población, particularmente entre los más jóvenes, animándolos a descubrir las disciplinas STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas) como un camino profesional y cultural.
FICYT insiste en que promover vocaciones científicas no solo fortalece el tejido investigador, sino que contribuye a un desarrollo social más equilibrado, crítico y preparado para los desafíos globales. Con esta unidad, Asturias se sumaría a la red nacional de UCC+i con una propuesta propia, adaptada al territorio y alineada con los valores de accesibilidad, inclusión y divulgación responsable.
Proyección europea: un impulso estructural para la innovación asturiana
La dimensión europea de FICYT es, probablemente, uno de sus rasgos menos visibles para la ciudadanía y, al mismo tiempo, uno de los más transformadores para las empresas y centros de investigación de la región. La fundación ha participado a lo largo de su historia en más de 30 proyectos europeos, 12 del área de la salud y 15 como entidad coordinadora. Actualmente gestiona 11 proyectos vigentes vinculados a programas tan diversos como Horizonte Europa, EU4Health, Erasmus o CERV.
Entre todos ellos sobresale la reciente incorporación de FICYT al proyecto NFP4Health2, donde participa como única entidad asturiana seleccionada. Este programa europeo de carácter sanitario tiene como objetivo crear una red de profesionales altamente cualificados que, desde los distintos países que conforman el programa financiador EU4Health, impulsen a la comunidad científica a generar iniciativas y proyectos innovadores en el ámbito científico-sanitario. El presupuesto de la fundación asturiana para este cometido supera los 100.000 euros.
Con una duración de 36 meses, involucra a 48 entidades de 32 países, e incluye actores de referencia nacional como el Instituto de Salud Carlos III, el Ministerio de Sanidad o la Fundación Pública Andaluza Progreso y Salud. “Nuestra participación en NFP4Health2 refuerza el compromiso de FICYT con la cooperación europea y con el impulso a proyectos que mejoren la salud y el bienestar de las personas. Además, sitúa a Asturias en una posición destacada dentro del mapa europeo de la innovación en salud”, subraya Mercedes Díaz.
El trabajo de FICYT en proyectos europeos va más allá de la ejecución. La fundación proporciona acompañamiento técnico, asesoramiento y formación a grupos investigadores y empresas que buscan financiación, ayudándolos a orientarse en un entorno regulatorio y administrativo cada vez más complejo. La labor del equipo facilita que más entidades asturianas puedan presentar propuestas competitivas y conectar con redes internacionales de colaboración.
Como señala Inés Rey, responsable de la unidad de Proyectos Europeos de FICYT, “este tipo de colaboraciones nos permiten compartir conocimiento y buenas prácticas con entidades de toda Europa. En el caso de NFP4Health2, nuestro objetivo es fortalecer la red de apoyo al programa EU4Health y ayudar a que más instituciones e investigadores asturianos accedan a oportunidades europeas”.
A partir de 2026, además, FICYT ampliará su área de intervención en proyectos europeos más allá del sector salud gracias a la firma de un convenio marco que permitirá colaborar directamente con todas las Consejerías del Principado. Un paso decisivo para extender la capacidad de Asturias en materia de cooperación internacional, innovación y transferencia de conocimiento.
La Enterprise Europe Network y la internacionalización de las pymes
Dentro de su estructura europea, uno de los pilares más potentes de FICYT es la coordinación regional de la Enterprise Europe Network (EEN) a través del consorcio Galactea Plus. Se trata de la mayor red de apoyo empresarial del mundo, impulsada por la Comisión Europea para ayudar a las pymes a innovar, crecer y competir globalmente.
FICYT, desde Asturias, ofrece a las empresas asesoramiento para encontrar socios internacionales, interpretar normativas, acceder a financiación europea, impulsar la digitalización, adoptar tecnologías de vanguardia o entrar en nuevos mercados. También pone a su disposición bases de datos con perfiles de colaboración, asistencia en eventos internacionales, misiones empresariales y herramientas de búsqueda de alianzas.
Entre los servicios más relevantes que presta la EEN destacan la internacionalización, a través del apoyo para encontrar socios, comprender regulaciones y abrir mercados fuera de España; la innovación y digitalización con asesoramiento para adoptar nuevas tecnologías, mejorar competitividad o modernizar procesos; el acceso a financiación europea mediante guías y orientación para presentar proyectos competitivos; y el asesoramiento en legislación europea ofreciendo apoyo en la interpretación de normativas clave para operar en la UE.
La red, además, ha incorporado la sostenibilidad como eje central, ayudando a las empresas a avanzar hacia modelos más resilientes, verdes y alineados con los objetivos de transición ecológica marcados por Europa.
Desde su creación en 1984, FICYT ha acompañado la evolución de la ciencia y la tecnología en Asturias, promoviendo la excelencia investigadora a través de becas, programas de movilidad, contratos, ayudas y proyectos que han permitido consolidar una infraestructura sólida y una comunidad científica puntera. Ha sido, como recuerda Mercedes Díaz, “un puente entre la ciencia, las instituciones y las empresas”. Un puente que hoy se mantiene vivo y que continúa creciendo con cada nuevo proyecto europeo, con cada iniciativa de divulgación y con cada avance que acerca la ciencia a la vida cotidiana de las personas.
La fundación encara la próxima década con una doble ambición: seguir profesionalizando el ecosistema innovador asturiano y fortalecer la proyección internacional de la región. Lo hace desde la convicción de que la ciencia y la tecnología son herramientas imprescindibles para construir una Asturias más competitiva, más conectada y más participativa.
Con una UCC+i recién creada, una presencia reforzada en Europa y una trayectoria de cuatro décadas acompañando a los agentes del sistema científico-tecnológico, FICYT se presenta hoy como una entidad moderna que acerca la ciencia a la sociedad y gestiona proyectos: los impulsa, los conecta y los transforma en oportunidades para toda la región.
Feria de la Ciencia y la Innovación de Asturias
El pasado 9 de mayo se celebró la tercera edición de la Feria de Ciencia, una iniciativa promovida por la Consejería de Ciencia, Industria y Empleo a través de FICYT y en colaboración con la Consejería de Educación y Valnalón, que tuvo lugar en la nave de Cañones de la Fábrica de Armas de La Vega, en Oviedo.
Esta feria nació con el propósito de ser un punto de encuentro entre las instituciones, que generan y transfieren la I+D+i en el Principado; las empresas, que desarrollan y aplican la innovación; y los centros educativos que contribuyen a fomentar las vocaciones científicas y el emprendimiento innovador entre el alumnado.
Los datos se superan año tras año, lo que muestra el éxito que va adquiriendo el evento. De hecho, este 2025 tuvo récord de participantes, llegando a reunir a más de 2.500 estudiantes y docentes, 69 stands, más de 500 expositores y un centenar de proyectos.
El consejero de Ciencia, Industria y Empleo, Borja Sánchez, destacó ese creciente interés hacia esta cita que reúne algunos de los trabajos más singulares que se han desarrollado en la región: “Es uno de los mejores escaparates para mostrar a la sociedad lo que hacemos en Asturias, la investigación de vanguardia que se realiza no solo en los laboratorios, sino también en las empresas”.
La feria contó con una importante presencia de la robótica, la inteligencia artificial, la realidad aumentada, el internet de las cosas (IoT), el big data, la energía limpia, los nuevos materiales, los brazos robóticos movidos por 5G o los vehículos de competición eléctricos.
Los visitantes pudieron contemplar, por ejemplo, sus propias células al microscopio o extraer su ADN genómico además de observar huevos y crías de tiburones, participar en exhibiciones de vuelo de drones, o acercarse al primer autobús autónomo de España del centro de I+D+i de Alsa.
Entre las exposiciones destacó la colección de muñecas científicas organizada por la Unidad de Cultura Científica de la Universidad de Oviedo y que se expuso por primera vez en Asturias. También entre las actividades singulares, el artista urbano César Frey (El Séptimo Crío) desarrolló un grafiti en directo dedicado al Año de la Ciencia Cuántica.