El Ministerio de Industria y Turismo activa una edición especial del Programa de Apoyo a las Agrupaciones Empresariales Innovadoras (AEI). La novedad es de calado: por primera vez, las ayudas se orientan a retos estratégicos concretos y se ejecutarán mediante proyectos colaborativos entre empresas, centros tecnológicos y otros agentes del ecosistema.
¿El objetivo? Impulsar innovación, fortalecer pymes y contribuir a la autonomía estratégica.
La convocatoria -amparada por la Orden ITU/868/2025, de 6 de agosto- ya está publicada y ofrece una ventana breve pero clara para presentar propuestas sólidas. El formato empuja a sumar sinergias y a llevar soluciones desde el laboratorio y la planta hasta el mercado.
Tres retos con nombre y apellidos
Ciudades inteligentes y climáticamente neutras: en línea con la misión europea que persigue 100 ciudades climáticamente neutras para 2030, convertidas en laboratorios de innovación exportables al resto.
Componentes innovadores para un nuevo ecosistema de movilidad: alineado con la Brújula para la Competitividad y el plan europeo para la automoción ante la electrificación y la competencia global.
Construcción industrializada y sostenible para una vivienda accesible: palanca del PERTE de la Industrialización de la Vivienda para acelerar oferta, con un modelo más verde, eficiente e inclusivo.
En clave operativa, los proyectos colaborativos podrán alcanzar hasta 800.000 € por actuación cuando involucren cuatro o más AEI. El plazo de solicitud se mantiene abierto hasta el 11 de septiembre, 18:00, exclusivamente por medios electrónicos. Para las organizaciones que ya trabajan en soluciones de ciudad, movilidad o vivienda industrializada, la convocatoria actúa como acelerador: invita a consorciarse y a demostrar impacto.
El anuncio se ha enmarcado en el Encuentro de la Economía Digital y las Telecomunicaciones 2025 (Santander), donde la Secretaría de Estado subrayó el foco del nuevo curso: reindustrialización y pymes, con las AEI como mecanismo probado para coordinar capacidades y desplegar proyectos alineados con la Estrategia 2030 y la neutralidad climática.
Sin duda, se trata de una convocatoria ágil, colaborativa y orientada a impacto. Una oportunidad muy interesante para que los clústeres traduzcan visión en pilotos escalables y -sobre todo- en resultados medibles sobre el territorio.
